dark mode light mode Search

Feminicidios, en blanco y negro

Los zapatos de tacón que presuntamente pertenecían a la agente Carla Ayala, quien habría sido asesinada por sus compañeros del ex Grupo de Reacción Policial (GRP). /Francisco Campos

El cadáver de Graciela Chávez Ramírez, de 22 años, fue encontrado en la mañana del 13 de febrero de este año, en el estacionamiento de la colonia Jardines de Zacamil. Su madre, desconsolada, llegó hasta la escena del crimen con el vestido de novia que la joven usaría para su boda, que se realizaría en abril.

Según la nota periodística publicada en El Diario de Hoy, al inicio las autoridades señalaron como principal sospechoso del crimen a la pareja sentimental de Graciela. No obstante, él se defendió diciendo que su relación había terminado pocos días antes y que la boda se había cancelado.

Graciela dejó en la orfandad a una niña de cinco años.

Francisco Campos, veterano fotoperiodista salvadoreño quien labora desde 2015 en El Diario de Hoy y el periódico Más!, dio cobertura a este asesinato como parte de su rutina informativa; pero ha mantenido una denuncia insistente sobre la falta de políticas de seguridad para la protección de la mujer y de la escasa investigación para aclarar los crímenes.

Graciela Ramírez iba a casarse en abril. Su madre llevó el vestido de novia al lugar donde fue asesinada en febrero de 2018.

“Me estaba acordando de que durante estos últimos tres años que llevo en el Más!-EDH he mantenido una constante denuncia; algún tiempo publiqué una foto diaria de un muerto ante el anuncio gubernamental de que en el país no pasa nada y que todo es invento de los medios. Quería denunciar la inoperancia de seguridad pública, de la policía… inclusive había declaraciones de que en el país era seguro circular cuando llegamos a tener 20 homicidios diarios. Ahora estamos en un promedio bajo, quizá ocho”, expresó Campos.

Del material fotográfico no publicado, Campos tiene una serie que muestra detalles de las escenas de crímenes de mujeres, es decir feminicidios; este es el tema central de la exposición “La insistente denuncia”, inaugurada el 17 de noviembre en Café Maktub.

“Todo surge de una necesidad con Don Chico y al ver la tasa de asesinatos a mujeres entendimos que podemos hacer un trabajo juntos y esa es la fuerza que tiene que a través de fotografías de él y información pedagógica y científica podíamos mostrar la exposición”, dijo Oscar Castillo, coordinador general de las actividades culturales que se realizan en el café.

Además de apoyar a los artistas, en el negocio se imparten clases de idiomas e instrumentos musicales, visitas guiadas, exposiciones artísticas y en el transcurso del año entregan útiles escolares a niños de escuelas públicas, colaboran con jornadas médicas y limpian playas.

“La insistente denuncia” cuenta con 17 fotografías de Campos y colaboraciones de los periodistas brasileños Beatriz Kestering y Gabriel Rosa. La curaduría fue efectuada por Verónica Torres, Oscar Castillo, Christy Najarro y Héctor Bigit, propietario del Café Maktub. 

Torres trabaja en la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos y cuenta con una maestría en Relaciones Internacionales, Seguridad y Desarrollo, mientras que Najarro es doctora en Literatura en Brasil y es profesora de portugués del Centro Cultural Brasil-El Salvador, apuntó Castillo.

Durante la inauguración se contó con testimonios de mujeres que han sufrido violencia además de aportes de especialistas en la defensa los Derechos de la Mujer y que muestran su preocupación sobre el incremento de víctimas mortales en 2018.

El primer informe de la Organización de Mujeres de El Salvador para la Paz (ORMUSA) indica que entre enero y agosto de 2018 se registraron 274 feminicidios, en los cuales, el arma de fuego fue la más utilizada, seguida por las armas blancas, las estrangulaciones y/o asfixias. Dicho informe también señala que las mayores víctimas fueron mujeres menores de treinta (30) años. De los 155 asesinatos cometidos en el primer trimestre, 15 fueron realizados por las parejas, o ex parejas de las víctimas.

Además del vestido de novia, otras fotografías de Campos muestran detalles de las escenas de otros crímenes, como el de dos vendedoras, una de las cuales quedó tirada frente a su puesto en el Mercado Central; en otra imagen los investigadores indagan el contenido de un delantal. Otras imágenes muestran el levantamiento del cadáver de una corredora, así como el de una mujer que caminaba sobre las vías del tren en ruta al molino llevando un huacal lleno de maíz, y un par de zapatos de tacón que fueron encontrados en un carro de ex Grupo de Reacción Policial (GRP), que se supone pertenecen a la agente Carla Ayala, desaparecida desde el 29 de diciembre de 2017 y presuntamente asesinada por sus compañeros de esa división.

Algunos de esos feminicidios esperan una resolución judicial. Por ejemplo, en el caso de Chávez Ramírez, tres meses después fue capturado el novio, Héctor Otero Turcios y un supuesto cómplice; la Fiscalía General de la República informó que al momento de ser capturado Otero tenía el cuchillo con el cual presuntamente la atacó, asestándole 56 cuchilladas, además del chip del teléfono de la víctima.

En cuanto a la agente Ayala,  la Fiscalía confirmó que sus restos fueron localizados entre agosto y septiembre en una zona rural de Usulután; la identificación fue posible gracias a las muestras de de ADN aportadas por su familia.  La Fiscalía ha ordenado la captura de ocho miembros de la Policía Nacional Civil y tres particulares, entre ellos el principal sospechoso, Juan José Castillo Arévalo (alias Samurai), por el feminicidio.

A propósito de las prueba científicas, una de las fotos de Campos muestra un detalle especial: el cadáver de una vendedora del Mercado Central tiene las manos cubiertas con bolsas. “Es para proteger cualquier indicio de prueba o rastro de sus agresores en caso que ella haya intentado defenderse y, además, para su posterior identificación en el Instituto de Medicina Legal”, afirmó una fuente de la Fiscalía.

¿Por qué en blanco y negro? La decisión fue de Francisco Campos y el jefe de fotografía de El Diario de Hoy, Mauro Arias. “Nos pareció un poco más artístico además de que no se vería la sangre que se ve ‘cruda’ en color”, afirmó Campos.

El material de Kestering y Rosa muestra carteles y manifestaciones a favor de los derechos de la mujer el 8 de marzo en Brasil.

“Estoy en ese evento increíble con tres fotos mías de las manifestaciones del 8M y de la Marcha Internacional por los Derechos (13º Mundo de Mujeres y Haciendo Género 11). ¡¡Qué delicia!! Quería dejar un agradecimiento cariñoso para Ana Carolina Cernicchiaro que me presentó a Christy, una de las realizaciones de esa exposición sobre las manifestaciones en América Latina.”, escribió Kestering en un post de Facebook.

Los organizadores han agradecido a Café Maktub “por la valiente decisión de ceder el espacio para exponer un tema fuerte y delicado como lo son también las imágenes que se presentan”.

El 25 de noviembre se conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer 2018; por ello en lugar de un aplauso final se concedió un minuto de silencio por las víctimas.

La muestra estará abierta al público hasta el 1 de diciembre.

Total
0
Shares